¿A que sabrá el Sabra? Descubre la esencia de Israel
La Oficina de Turismo de Israel, nos ha lanzado un retro para este FITUR 2015, contar nuestra experiencia con el famoso licor israelí, el Sabrá, bajo el hashtag #RetoSabra. Sin duda la mejor forma de participar en el reto es contar nuestra propia experiencia: EL SABRA En su origen Sabra era un licor procedente de la destilación del cactus Sabra muy común en la zona. Poco perduró la formula inicial ya que apenas gustó. Posteriormente, a la base alcohólica se le añadió el chocolate y el sabor de las famosas naranjas de Jaffa, que tienen la peculiaridad de su sabor ácido y dulzón, realzando el gusto de este licor . Sus 30% de alcohol harán el resto, convirtiéndolo en el más famoso de Israel. Este popular licor israelí puede tomarse tanto frío como caliente ya que su sabor cambia en función de si lo enfriamos, resaltando el sabor a chocolate, o calentándolo resaltando el sabor cítrico. Puede tomarse solo o como ingrediente en cocteles. No hay que decir, que como producto judío, Sabra es kosher. El original diseño de la botella tiene su origen en los frascos fenicios utilizados hace 2000 años para contener vino. Este licor fue desarrollado e introducido en los años 60’s por la familia Bronfman, propietarios de la marca Seagram. Actualmente es producido por la destilería Carmel Winery. Sabra es más que un licor, describe perfectamente en su sabor el pueblo israelí, espinosos por fuera (como el cactus Sabrá) y dulces por dentro (como la mezcla del chocolate con la naranja).
SABRA EN PRIMERA PERSONA Sabra debe tomarse rodeado de amigos y buena charla. Seguramente es esto lo que me llevó a comprar mi primera botella de Sabra en Israel. Fue en mi primer viaje al país. Mis expectativas por descubrirlo junto a un excelente grupo de viajeros, convirtió esta experiencia en algo inolvidable para mi. Dentro de esas manías que todos tenemos en llevarnos algo de recuerdo de todos los viajes que realizamos, la mía, es coleccionar imanes para la nevera. Pero en este viaje fue distinto. Necesitaba llevarme algo más. Algo del buen sabor de boca de mi visita a Israel y algo de la esencia del país. Ya en el aeropuerto, y aun dandole vueltas en mi cabeza de que podía comprar, me decidí finalmente por una botella de Sabra. Algo insólito en mi, ya que era la primera vez que compraba alcohol en un aeropuerto. Me decidí porque durante el viaje lo habíamos probado en alguna cena y ese regusto de naranja y chocolate me convenció a la primera, y más a un goloso como yo. Fue mi mejor elección. EL EFECTO SABRA El efecto Sabrá no es solo alcohólico, Sabra me ha permitido recordar con mis amigos los buenos ratos que he pasado en el viaje que realicé y rememorar aventuras y anécdotas vividas, es entonces cuando realmente te das cuenta de que Sabra es parte de la esencia de Israel. Con algo menos de media botella de Sabra, me esta entrando la nostalgia de querer regresar a Israel, no solo para conseguir otra botella de este delicioso licor, sino para conocer nuevos lugares y revivir experiencias únicas. Y recuerda: “Prickly on the outside, but sweet on the inside” (espinosos por fuera pero dulces por dentro). Cuantas más veces regreses más a dentro llegarás.